Una dieta antiinflamatoria es la clave de la longevidad, debido que inflamaciones inapropiadas forman parte en las etapas de muchísimas enfermedades crónicas, incluyendo afecciones cardiacas y Alzheimer.
También debe ser rica en antioxidantes, para contrarrestar el daño que produce la oxidación relacionada con el aumento de la edad.
A continuación algunos consejos de alimentación, para vivir más y mejor:
Consuma grasas saludables.
Un paso importante para detener la inflamación es consumir ácidos grasos Omega3, que reducen el riesgo de ataque al corazón y ayudan a prevenir Alzheimer y demencia.
Se pueden encontrar en el salmón, bacalao, sardina, y semillas de lino.
También es importante que se limite en ingerir ácidos grasos omega 6, ya que sus grasas son inflamatorias. Se puede encontrar en: girasol, maíz y aceite de soja. La forma más sencilla de no ingerirlos es eliminando o reduciendo el consumo de alimentos procesados, manufacturados, y las comidas rápidas.
Utilice aceite virgen de oliva para cocinar, eliminando grasas y aceites hidrogenados.
Prefiera carbohidratos de digestión lenta.
Consuma granos, legumbres, vegetales de raíz como la papa, el boniato y la remolacha, los cuales poseen un bajo porcentaje de glicemicos.
El aumento de azúcar en la sangre causada por carbohidratos y la digestión rápida eleva el riesgo de la resistencia de la insulina y puede acelerar el procedo de envejecimiento. Altos niveles de azúcar en la sangre pueden interactuar con las proteínas para producir componentes tóxicos que dañan la estructura celular.
Elija colores
Consuma abundante frutas y verduras, que son ricos en antioxidantes.
Elija la mayor cantidad de colores cuando consuma sus frutas y vegetales, desde fresas rojas y zapallos anaranjados, hasta espinaca verde y limones amarillos.
Consuma fresas
Son una gran fuente de antioxidantes
Las moras están cargadas de polifenoles, pero no se limite solo a ellas. Elija frutillas, grosellas, arándanos, zarzamora, frambuesas.
El jugo de granada contiene más antioxidante que cualquier otra fresa.
Un estudio demostró que gente con afección coronaria que bebió jugo de granada diariamente por tres meses mejoro el flujo de la sangre al corazón.
En adición, las fresas ayudan a mantener el nivel de azúcar en la sangre estable.
No se olvide de las hojas verdes
Los vegetales de hojas verdes tienen que ser considerados especialmente en su dieta, ya que protegen sus ojos y sus huesos
Berza, kale y cardo son una gran fuente de luteína, que protege la degeneración macular relacionada con la edad.
Los vegetales de hojas verdes también contienen calcio y vitamina K, los cuales son muy importantes para la salud de los huesos.
Beba su juventud
Beba te verde, blanco u oolong para diariamente, ya que contienen EGCG, un antioxidante muy poderoso.
Y por supuesto, jugos frescos de frutas y verduras.
Elija frutas secas
Un puñado de nueces es el bocado perfecto para una larga vida.
Investigaciones demuestran que los frutos secos nos dan sensación de saciedad, y nos alimentan, sin causarnos aumento de peso, a pesar de su reputación con respecto a las grasas que poseen.
Adicionalmente, estos frutos ofrecen fitonutrientes beneficiosos, que también se pueden encontrar en las frutas y las verduras.
Por ejemplo, los pistachos son una gran fuente de lutenio, la piel de las nueces contiene poderosos antioxidantes encontrados también en los cítricos.
Los frutos secos reducen el colesterol malo y las nueces y los pistachos protegen el corazón, reduciendo la absorción de azúcar en la piel, al consumirlos después de una comida alta en carbohidratos.