Como Shakti uno asciende las siete chakras, eventualmente llegando a sahasrara, sin que la propia existencia de uno pueda controlar esta fuerza. Shakti puede confrontar las energías malignas vinculadas con las chakras, ya que por naturaleza es un poder activo. Esta acción puede describirse como un objeto destruyendo una pared de ladrillos. Aunque la pared era estable, el objeto es más poderoso. Shakti es el objeto, y todas las inseguridades, miedos, y emociones negativas son la pared que es destruida. Todo el cuerpo produce la fuerza con la cual se realiza este asalto sobre la negatividad.
Kundalini Yoga está basado exactamente en esta teoría. Se cree que Shakti puede demoler debilidades en el mooladhara, amenazas en el swadhisthana, deseos egoístas en el manipura, y el deseo interior de aprovecharse en anahata. Las enseñanzas yóguicas enfatizan en el acto de superar las cuatro características humanísticas primarias, que se explican más en detalle en la siguiente tabla.
| Instinto Humano | Características Innatas | Ubicación |
| Maithuna | El deseo sexual | Mooladhara |
| Bhaya | Dudar de uno mismo e inseguridad | Swadhisthana |
| Ahara | Deseos Ilimitados | Manipura |
| Nidra | Desapego | Anahata |
Cómo seres humanos, tendemos a indagar al interior de nuestro ser cuando el mundo exterior se hace sobre-estimulante. El ser físico utiliza nidra, o el sueño yogui para descansar. Nuestras mentes necesitan el descanso tanto como nuestros cuerpos, y el sueño puede verse como un mecanismo protector para evitar que nuestros sentidos se sientan abrumados.
Kundalini Shakti se abre camino por entre las chakras y destroza instintos innatos, una tarea que puede ser difícil. Aunque puede ser posible que la auto-consciencia sola cure nuestras tendencias humanas negativas, muchos de nosotros nunca hemos intentado hacerlo. Es natural que un ser vivo gravite ante la jocosidad, o darshan, mientras evita la negatividad interior.
Kundalini Yoga puede ser una base iniciar para lograr un nivel de realización; no somos perfectos, somos humanos. Incluso si no podemos alcanzar la perfección, el equilibrio es una meta realizable. La fase de descanso debería estar encaminada a la eliminación de tendencias negativas, en vez de soñar despierto con frivolidades que nunca beneficiarán al alma.