Se dice que la mente es nuestro mejor amigo, o nuestro peor enemigo. Es sorprendente observar cuanto sufrimiento creamos en nuestras vidas porque no tenemos conocimiento de como funciona la mente.
Muchas personas se han dedicado al estudio de la mente dejando un valioso legado detrás. Pero incluso con todo eso, para la mayoría de las personas este legado permanece como simple conocimiento, sin posibilidad de poner en práctica en su vida diaria.
Si observamos a la multitud de gente que pasa por un aeropuerto, o en una gran ciudad, todos ellos parecen ocupados totalmente sumergidos en sus pensamientos. Muchos de nosotros hemos visto a personas hablando en alto en medio de la calle con una supuesta persona invisible, y esperamos que nunca nos volvamos como ellos, pero la realidad es que nosotros hacemos lo mismo, simplemente no lo hacemos en alto, la mayoría de las veces lo mantenemos dentro de nuestra cabeza.